Soy una mala, mala blogger. Un desastre total y rotundo. Hoy es 15 de febrero, un día después del día de San Valentín. Y esta se suponía que iba a ser mi receta para publicarles para el 14 de febrero y se me olvidó completamente.
Pero hey, yo soy de las que cree fervientemente que el amor debe celebrarse todos los días, así que esa será mi maravillosa excusa para pedirles disculpas por haber olvidado esto.
La verdad es que si creo que el amor debe celebrarse todos los días, pero se me olvidó por completo publicar esta receta porque he tenido como tres mil quinientos cuatrillones de cosas en la cabeza (y siento que voy a explotar si no les cuento pronto todo. Pero bueno, todo a su tiempo!)
Independientemente de que se me olvidara postearla unos días antes del 14 de febrero, necesitaba mostrarles esta receta. Es una completa y absoluta delicia y es súper sencilla de hacer.
En realidad me inspiré para hacer esta receta en una pastelería de Key Biscayne que adoro: Piononos. Su dueña María Luisa Benavides hace una pavlova deliciosa y un poco diferente a la clásica porque le pone nueces al merengue, sabía que tenía que hacerlo en mi casa y el resultado fue tan increíble que tenía que compartirlo con ustedes.
Las pavlovas son el postre ideal para cuando quieren hacer algo que impresione a sus amigos o a su familia y no quieren complicarse demasiado. Son deliciosas y no necesitan ingredientes complicadísimos para hacerla. Aunque pueden hacerla con Nutella o ganache de chocolate, yo adoro la versión con dulce de leche.
La crema chantillí les podrá parecer una exageración, pero les aseguro que es el toque y complemento perfecto para toda esta combinación. Cada componente y cada capa juegan un papel increíble en lo que es el todo que se llevan a la boca: el sabor increíble a almendras y la textura tostadita de la base de merengue es increíble, luego lo denso, dulce y cremoso del dulce de leche, después lo suave, aireado y cremoso de la crema chantillí y por último lo ácido de las fresas. También pueden usar kiwis o cualquier otro fruto del bosque como frambuesas, arándanos o moras para el topping, le quedan deliciosas!
El punto de la receta en el que deben tener más cuidado es al incorporar las almendras molidas o harina de almendras al merengue, deben asegurarse de hacerlo con una espátula de goma y usando movimientos envolventes para prevenir que el merengue se baje en el horno y pierda su cuerpo. Si no tienen almendras en polvo pueden usar avellanas, maní o nueces en polvo. Yo hice la presentación en forma de corazón (por aquello de que iba a publicarla para el 14 de febrero *oops*), pero ustedes pueden hacerlo en la presentación que más les guste, cuadrado o redondo también quedan preciosos!
Si tienen alguna duda con respecto a los ingredientes o la preparación, si quieren sugerir o pedir una receta, o si prepararon esta pavlova y me quieren contar cómo les quedaron (¡me encantaría saber su experiencia!), no duden en ponerlo en los comentarios abajo.
Además, recuerden que amo ver las fotos de lo que hacen con mis recetas!, pueden enviármelas por Instagram etiquetándome en @annaspasteleria, o usando mis hashtags #AnnasPasteleria y #RecetasQueNoFallan
Espero que estén teniendo un día lindísimo!,
Anaísa